24 junio, 2023 

Pilar Molina

Al final, son hombres febles como todos y su valía se mide cuando tienen el poder y los recursos para demostrar que poseen “una escala de valores y principios” superiores, como dijo Jackson.

Las donaciones a Democracia Viva son peor que Caval o SQM porque se trata de platas fiscales que autoridades de este Gobierno están desviando desde el Estado a activismo político o a sus bolsillos. Para los efectos ciudadanos, lo mismo.

Conocemos apenas la punta del hilo: la donación de $3 mil millones por parte del Seremi de Vivienda de Antofagasta, según investigación de Radio Biobío, entre octubre y diciembre de 2022, a diversas fundaciones para mejorar transitoriamente la vida en lugares usurpados y que funcionan como campamentos.

Lo que se repite:  

1. Son cifras siderales en cortos períodos de tiempo, que se transfieren a partir de octubre y hasta diciembre de 2022, después de ser derrotado el oficialismo en el plebiscito.
2. Que algunas de esas fundaciones no tienen experiencia en el área.Democracia Viva, por ejemplo, tenía un claro perfil de activismo político, hizo campaña por el Apruebo y cuando ya le habían aprobado la primera remesa del total de $426 MM, anunció la búsqueda de un encargado territorial para Antofagasta. O la Fundación Educación Arte y Cultura Fibra, que se dedica a lo que dice su nombre, pero recibió $430 millones para mejorar la vida de campamentos de la II Región.
3. Se reiteran los militantes de Revolución Democrática y cercanos a la diputada y ex presidenta de ese partido, Catalina Pérez, que es olímpica. La agreden a ella, argumenta, cuando se trata de negocios entre su actual pareja, Daniel Andrade, de la beneficiaria Democracia Viva, y su ex jefe de gabinete y seremi de Vivienda de Antofagasta, Carlos Contreras, que transfiere los recursos. Otra fundación que recibió $577 millones entre noviembre y diciembre del seremi de Antofagasta fue Urbanismo Social, en la cual trabajó 6 años y medio, hasta abril de 2022, Rodrigo Hernández.  Curiosamente, otro RD, que actualmente es seremi del Maule y en tal cargo asignó 109 MM a la misma fundación.  Y la subsecretaria de Vivienda Tatiana Rojas¡no me diga!, también es RD y no inició sumario, ni auditoría cuando fue advertida de las irregularidades por los funcionaros del Serviu regional el 2 de mayo.

Y si no son RD, son todos del Apruebo y cercano al Frente Amplio. Los funcionarios denunciantes señalan que el mismo Seremi Contreras autorizó pagar el arriendo a la Fundación Procultura por un monto mensual de casi 3,4 millones por 16 meses, totalizando $54 millones que “fueron pagados de manera anticipada” al subarrendatario. La pareja del Presidente Boric trabajó por un año y hasta marzo 2022 en esta entidad, que recibió $500 millones en octubre pasado de la Seremi. Pero, al menos, tiene experiencia previa, a diferencia de Democracia Viva que se originó en febrero de 2022 en Ñuñoa, un mes antes que asumiera Boric. El presidente y fundador de Asociación Campamentos de ideas, Ernesto Espinoza, obtuvo del mismo Seremi Contreras $984 millones en noviembre y compartió en redes sociales su apoyo al candidato Boric. 

¿Más similitudes? Se repite Ñuñoa como sede de las fundaciones o como la comuna donde se registraron las entidades. También, que hacen negocios entre amigos de RD que pasan por diferentes cargos de gobierno. Quien arrendó la casa en Ñuñoa a Democracia Viva, además de RD y amiga de la diputada Pérez, estuvo el año pasado trabajando 4 meses en el Mineduc por 5 millones 750 mil mensuales. Andrade no sólo era de la fundación beneficiada por el Seremi amigo, sino que era asesor de Defensa, es decir, funcionario público, y entre agosto y septiembre del año pasado fue analista político del MOP.

Otra coincidencia:  todos los tratos con las seremías fueron directos, sin competencia, y como los pagos fueron parcializados, por montos inferiores a los $300 mil, evitaron pasar por Contraloría.

¿Se repetirá el esquema en cuántas otras regiones, seremías y subsecretarías, como la de Desarrollo Social que reparte ingentes recursos?

No debiera extrañar que sigan apareciendo casos, porque, aunque el Mandatario llamó el jueves a “ser más firmes” que lo que fueron ellos para condenar donde vieron corrupción “en los 30 años”, hace rato que se encienden alarmas que no hacen mella.

¿Ya se olvidó que el tercer partido del Frente Amplio, Comunes, protagonizó un escándalo cuando su candidata a gobernadora Karina Oliva le traspasó a título de “gastos de campaña” millonarias cifras a sus cercanos, incluido su ex pareja, padre de su hija y ex presidente de Comunes, Jorge Ramírez? Caía el maná desde el Estado para financiar su alta votación (se paga por voto) y no se podía dejar pasar.

Es cierto que se hace más fácil llevar a familiares al gobierno cuando no contraen matrimonio. Pero no resulta obvio que no se trate de nepotismo cuando la excusa es que ya no son pareja, como argumentó el ministro Jackson cuando se criticó que después de perder el plebiscito llegara a La Moneda la convencional que fue su polola Constanza Schönhaut. O que “no existe vínculo sanguíneo”, que fue la réplica cuando se criticó que el MOP contratara al hermano de otra polola suya en marzo.

¿Y nos olvidamos de Mariano Rosenzvaig, uno de los fundadores de RD, contra quien se querelló la alcaldesa de Providencia por la pérdida de miles de millones de pesos destinados a los más vulnerables de la educación pública? ¿Y qué pasó?, le preguntaron días atrás.  “Uno de los involucrados fue condenado, otro aún no porque vive en Londres gracias a una beca que le entregó el Estado”, respondió Evelyn Matthei refiriéndose al histórico de RD.  

¿Y la promesa de que nadie en el gobierno ganaría mas de 5 millones y el instructivo sobre el tope de sueldo para los asesores que el propio Ejecutivo olvidó para solicitar exceder los límites para 114 colaboradores a diciembre pasado?

 Al final, son hombres febles como todos y su valía se mide cuando tienen el poder y los recursos para demostrar que poseen “una escala de valores y principios” superiores, como dijo Jackson. Hasta aquí no Aprueban.

Fuente: https://ellibero.cl/opinion/pilar-molina-no-aprueban/

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