Osvaldo Rivera Riffo
Presidente
Fundación Voz Nacional

Este artículo se divide en cuatro capítulos, donde abordo diversos problemas y situaciones de la derecha chilena que en mi opinión son preocupantes para su presente y futuro. Concluyo con un mensaje para los patriotas para hacer frente a dicho escenario.

Primer capítulo.

Estamos consternados por el nivel de corrupción de la clase política, especialmente en las generaciones más jóvenes, quienes llegaron a la actividad pública con la promesa de ser agentes de cambio, declarando una moral y ética superiores a la de sus predecesores, aquellos veteranos de “los 30 años”, muchos de los cuales aún ocupan cargos públicos en diversos ámbitos del quehacer nacional. Pero lo cierto es que, en poco tiempo, estos jóvenes políticos se han convertido en una generación corrupta, saqueadores de las arcas públicas, en una cuantía mucho mayor que la de sus predecesores.

Actualmente, la corrupción está instalada al menos en dos Ministerios, Vivienda y Urbanismo y Desarrollo Social. La corrupción se extiende en el Gobierno y es cada vez más habitual encontrar a alguien enredado en algún nuevo escándalo.

La información que maneja la opinión pública señala que los jóvenes políticos del Frente Amplio, ya sean de Revolución Democrática o Comunes, han recibido financiamiento discrecional de dos Ministerios, e incluso de la Presidencia de la República, según los últimos antecedentes.

La fiscalía investiga el desembolso de más de 4.754 millones de pesos a cinco fundaciones vinculadas con el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, a cargo del ex senador socialista Carlos Montes, sumándose otras denuncias de parlamentarios que agregan otros 4.800 millones de pesos más en dicho Ministerio.

El presidente de RD, Juan Ignacio Latorre, fue advertido 10 días antes por los propios involucrados de que estallaría este escándalo pero no dio aviso al Gobierno, quien ha improvisado una serie de declaraciones absurdas y trágicas para intentar encubrirlo, sin embargo ya ha llegado a las puertas de palacio y se extiende hacia los pasillos del gabinete presidencial. Hoy el Presidente Boric señala que sí fue advertido y su Ministro de Justicia corrigió sus dichos, hundiendo y comprometiendo más aún al propio Gobierno.

Adicionalmente, la senadora Yasna Provoste denunció a una nueva fundación, esta vez vinculada con el Ministerio de Desarrollo Social, a cargo del fundador de RD Giorgio Jackson, fundación que recibió 160 millones de pesos sin tener la experiencia ni antigüedad mínima necesarias para haber sido adjudicada.

Tanto el ministro Montes como el ministro Jackson han intentado interpretar lo mejor posible el libreto preparado, involucrando al gobierno de Piñera, intentando diluir responsabilidades y morigerar el daño en sus filas.  Luego, Montes se desdice con el método clásico de esta administración, la voltereta. Consiguiendo desprestigiarse aún más y perder el escaso apoyo de los pocos aliados que les quedaban en el sector más conservador.

Si todo funcionara como debe ser, según el estado de derecho, ambos ministros deberían haber sido desvinculados. Pero ocurre todo lo contrario, en la lógica refundacional, en los criterios de la posverdad y en el relativismo inmoral que impera en esta ideología de izquierda, se protegen entre ellos y se defienden, incluyendo al presidente, quien al parecer ya no representa a todos los chilenos sino a una “organización ideológicamente falsa”.

Segundo capítulo

En medio de este escándalo que ha copado las redes sociales y los medios de comunicación, la Convención Constitucional navega viento en popa, blindada por las circunstancias. Los políticos guardan silencio y reina una falsa paz en el Olimpo para redactar un tratado de “injusticias inmorales, amorales y espurias” (ilegal J.A.Kast).

La Convención tiene su origen en aquellos que hoy están siendo cuestionados públicamente por su corruptela y por los adherentes del gobierno de Boric, quienes aspiran a firmar una Carta Magna redactada por el “grupo de expertos”, grupo pro globalista, con el que pretenden dar legitimidad al proceso, más la participación de 50 convencionales electos, 22 de los cuales, siendo de derecha, engañaron a Chile sumándose al coro de la música globalista. Uno de estos últimos, un joven y promisorio líder, obtuvo una mayoría de votos histórica en la región metropolitana, pero que hoy guarda un silencio sepulcral. Sin duda, su liderazgo hace sombra, por lo que le prohíben hablar. En el partido al que representa solo se permite hablar y obedecer las palabras de su líder. Lo mismo ocurre con otros que valientemente denunciaron este proceso espurio.

Tercer capítulo

Con estupor he leído una pseudo encíclica publicada en redes sociales por el líder del Partido Republicano. Un escrito carente de peso intelectual, lleno de contradicciones y utilizando un materialismo dialéctico del PC para renunciar a todo lo que había sostenido hasta septiembre de 2022, cuando consideraba “ilegal, inmoral, amoral y espurio” el acuerdo constitucional en el que no participaron inicialmente, ya que vulneraba la voluntad soberana expresada mayoritariamente en las urnas el 4 de septiembre.

Republicanos, quien reconoció que lideró esa jornada de rechazo a la propuesta constitucional, ahora sorprendentemente expresa sus esperanzas de que este nuevo proceso, al que tacharon previamente de ilegal, llegue a buen puerto con una buena propuesta constitucional.

En su escrito, Kast miente porque sabe que es imposible modificar los 12 bordes y que las indicaciones solo cubrirán la forma pero no el fondo globalista del nuevo texto.

En esa carta pública, su líder arremete contra uno de sus militantes porque este último afirma que el actual anteproyecto constitucional es “una ordinariez sin contenido”. Además, critica a los 2,5 millones de chilenos que votamos nulo.

Pero la habilidad intelectual brilla por su ausencia en Republicanos, ya que, si hubieran tenido mejores asesores, podría haber trabajado esos votos y ganado apoyo. Sin embargo, con sus declaraciones internacionales y sus volteretas, no solo ha espantado a sus seguidores, sino que ha alejado irremediablemente sus aspiraciones presidenciales.

En el duro juego de la política, Kast yerra adoptando una posición mesiánica como “servidor iluminado del pueblo” y más aún, emplazando públicamente a uno de sus militantes por sus dichos. ¿Acaso piensa que todos sus adherentes son como el consejero de Bío Bío que, presionado por él, no juró su cargo con el que representaría a más de 110 mil adherentes y aceptó, por el contrario, salir de viaje hacia Europa para no convertirse en el “Rojas Vade” de la derecha, lo cual podría dañar la imagen del líder?

El ejercicio de la política es duro y produce desencanto. Los malos actores son quienes se aprovechan de esta noble función y no aquellos que deberían ser ejemplos dignos de imitar y aplaudir.

Cuarto capítulo

Resulta curioso que los miembros del Partido Republicano estén mostrando una intolerancia extrema con la disidencia entre sus filas.

Recientemente, un miembro de su Tribunal Supremo, en un artículo que pretendía revelar la verdad absoluta, criticó mi posición utilizando un lenguaje bajo, no como una mera discrepancia de ideas, sino expresando desprecio y molestia hacia mi persona. Lo hizo nuevamente en un programa de YouTube donde se refirió a Hermógenes Pérez de Arce de manera inaceptable. Y su líder coronó este encono con sus mismas filas, arremetiendo contra un militante y contra los Patriotas.

Parece que defender a Chile del asfixiante progresismo y rechazar la agenda 2030 con todas sus implicaciones maliciosas no son preocupaciones para el Partido Republicano.

Ellos buscan el “diálogo”, claro está, para construir democracia y hacen pactos con la izquierda, mientras su rival de derecha, la “derecha cobarde”, llama a derrotar a los republicanos para salvar a Chile.

Es el mundo al revés. Tenemos al Papa Francisco diciendo que la riqueza es el estiércol del diablo, mientras que los políticos niegan la defensa patriótica de la soberanía.

Conclusión

Todo este proceso constitucional que vive nuestro país actualmente es “ilegal, inmoral, amoral y espurio”, pero Kast al parecer ya olvidó lo que afirmó. Por lo tanto, es crucial estar alerta y no dejarse engañar por escritos, decretos o discursos mentirosos de su líder.

El texto de la constitución ya está escrito y todo lo que hacen o dicen los políticos es solo una cortina de humo, teñida de corruptela.

No lo olviden, salvemos a Chile y votemos en contra de la nueva propuesta constitucional el próximo 17 de diciembre.

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