11 DE OCTUBRE DE 2019

 

 

 

Los norteamericanos dicen que político honrado es el que, cuando se vende, cumple con el que lo compró. Tuve que dejar por unos días la vigilancia de este país sobornado y ahora que vuelvo me doy cuenta de que jamás lo debí haber hecho. No es que el programa de gobierno se hubiera dejado de cumplir, pues lo ha hecho al pie de la letra (ustedes saben que ese programa, el verdadero, el real, tiene una sola línea y dice: "Piñera debe estar todos los días en los titulares y en el centro de la foto y nada de lo demás importa nada")

No me refiero ya a que la derecha no mande y haya de hecho casi desaparecido de la escena, sino a que ni siquiera puede existir. A la alumna Polette Vega, que no es ni siquiera de derecha a secas ni pinochetista ni partidaria del Sí, como yo, sino perteneciente a esa cosa amorfa que llaman "centroderecha" (término inventado por los derechistas en pánico de los 60 para poder sobrevivir a la ola izquierdista que cubría al mundo), no la han dejado asistir a clases en el Piedragógico (nombre acuñado bajo el Gobierno Militar porque en el Pedagógico se atrincheraban los guerrilleros marxistas en los períodos de descanso en que no asesinaban ni volaban carros de Metro), sino que ahora es peor: como Polette no es de izquierda ni kerensky ya no puede siquiera entrar a clases. Lo anterior sólo salió en "La Segunda".

"El Mercurio", en pánico ante los rojos desde que publicó un aviso pagado el 11 justificando el 11 y su personal de izquierda se manifestó contra el diario, siguió publicando gratis medias páginas y cuartos de página de la sucursal roja Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (estos últimos, según mis cuentas, simplemente ya no existen, porque todos los paraderos de participantes en la lucha gobierno militar-terrorismo han sido precisados, pero en casi treinta años no se ha querido identificar restos, algunos de los cuales permanecen en bolsas en la propia sede de la AFDD). Y también ese diario publicó gratis otro inserto rojo, de la asociación de "ejecutados políticos", nombre que se da a los guerrilleros caídos antes de matar más militares. Como ya el propio personal de izquierda del diario había hecho una manifestación amedrentadora contra sus dueños por haber éstos admitido publicar, pagado, el inserto de derecha que remeció al país y que reproducía documentos históricos probatorios de que una gran mayoría nacional pidió la acción militar del 11 de septiembre de 1973, uno puede anticipar que el matutino va a tener mucho cuidado antes de volver a publicar algo que reivindique la verdad histórica. Ése es su actual estado de situación.

La izquierda se siente, y con razón, dueña del país. Porque ¿cómo se explica, si no, que un extremista interrogado hace casi 46 años logre meter preso a un coronel (r) sin otra base que su afirmación de haber sido torturado, lo cual le ha granjeado, además, treinta millones de pesos de indemnización judicial? Para la izquierda es cuestión de hablar y cobrar. Busqué la noticia de la condena ilegal de Labbé en los diarios del domingo y no encontré nada en "El Mercurio" y solo un referencia en "La Tercera", donde su columnista Matamala aplaudía el fallo contrario a todo derecho y la insólita condena a Labbé.

Pero ¡cuidado! No se olvide que, cuando el nombre "Cristián Labbe" apareció en una cédula electoral en 2017, sacó 70 mil votos, primera mayoría nacional de consejeros regionales, sin propaganda ni recursos. Era el hijo de Labbé, pero eso lo dijo todo sobre la base popular que tiene la imagen del Gobierno Militar, de la cual todos, pero todos los partidos, salvo Fuerza Nacional (en el cual por eso me he inscrito) huyen como del demonio.

El reinado de la izquierda se manifiesta también, como en ningún otro aspecto, en la dictadura judicial actual, que pasa por sobre todas las leyes para condenar militares, abandonados por sus camaradas activos y que, por tanto, yacen "caídos tras las líneas enemigas". Un protagonista de la dictadura judicial, el supremo Sergio Muñoz, explica así por qué él no obedece las leyes: "Yo he jurado respetar la Constitución y la ley viva, no el texto escueto de sus disposiciones, sino lo que la inspiró". Lo cual, por supuesto, puede ser cualquier cosa que a él se le ocurra. Este dictadorzuelo es, además, mentiroso, porque sabe lo que juró al asumir: respetar la Constitución y la ley a secas, no la "ley viva" que ha inventado. Es la frescura dialéctica  propia de todos los prevaricadores que mantienen a más de 200 Presos Políticos Militares tras las rejas. No es la ley la "viva". Los únicos vivos son ellos, que más encima han llenado de plata a la guerrilla izquierdista a un costo económico-social parecido al del Transantiago.

Todo se ha degenerado tanto en el país que el Colegio de Abogados, gremio en su mayoría centroderechista, ha terminado en manos de mujeres de izquierda que han entrado en pacto con el comunismo y sus entidades de fachada de familiares de supuestos detenidos desaparecidos y ahora van a darles ¡títulos de abogados! póstumos a los guerrilleros que eran estudiantes de derecho y cayeron en la confrontación exigida por Frei Montalva en 1973, cuando conminaba a los generales: "ustedes tienen las bayonetas, pero no las usan". Y cuando éstos le hicieron caso y las usaron, vean lo que les pasó.

La evolución del Colegio de Abogados ha sido pintoresca, pues su entusiasmo el 11 de septiembre de 1973 fue tan grande que su entonces presidente, el democristiano Alejandro Silva Bascuñan, promovió un acuerdo del Consejo para declarar "legítimo " al gobierno militar, mediante un raciocinio jurídico-filosófico que se publicó íntegro en la Revista de Derecho y Jurisprudencia de octubre de 1973. Deberían todos entonces llamar al GM "gobierno legítimo", en vez de "dictadura", como lo llaman hoy hasta los "centroderechistas". Pero la mayoría de derecha entre los abogados nunca sirvió para nada. Cuando un colega le preguntó a su entonces presidenta (de derecha) por qué nada decían ante la prevaricación judicial contra los militares, ella contestó: "Si planteo el tema, se quiebra el Colegio". Tal mayoría aceptó una reforma electoral para que se consagraran "cuotas de género" en su directiva y, habiendo ganado todas las elecciones la centroderecha, se encontró con que un abogado varón elegido con más votos debió dejar su cargo para que una abogada mujer resultara elegida con menos votos pero en virtud de la "cuota de género". Todo antidemocrático. Resultado: el Colegio, en manos kerenskys, ahora marcha de consuno con las asociaciones rojas de DD. HH., organismos de fachada del comunismo. Brillante logro de un electorado mayoritariamente de derecha. Esto último sólo nominalmente, porque a mí me censuraron en la Revista del Abogado un artículo que denunciaba a un colega kerensky que había prevaricado ostentosamente, como integrante de la Corte Suprema y redactor de un fallo vergonzoso. Yo publiqué mi artículo censurado por el Colegio de centroderecha en este blog, el 27 de marzo de 2015 y cada vez que lo vuelvo a citar aumentan los ya más de 2 mil lectores que lo han buscado y leído, según el registro del  blog. Quedó ahí "para perpetua memoria".

Y basta por hoy de país perdido en manos de la izquierda a través de Sebastián Piñera, como denuncian todos los que paran en protesta por eso en la Araucanía, pidiéndole "pantalones" (lo que no sale en los diarios) y son reprimidos por la policía.

Fuente: http://blogdehermogenes.blogspot.com/

.