13 DE OCTUBRE DE 2019
Estimado señor Presidente: Le escribo porque usted es una figura de coraje político casi único en el mundo contemporáneo, como que se ha atrevido a decir que el gobierno de Pinochet salvó a Chile del comunismo, verdad que sólo un estadista como usted o el Presidente del Brasil, Jair Bolsonaro, han osado manifestar públicamente.
Le escribo, además, porque en días recientes una repartición de su gobierno ha conminado al régimen del Perú a poner fin a las situaciones que allá mantienen a cien personas en condición de presos políticos.
Estos últimos son definidos como quienes han sido privados de su libertad, no en razón de lo que disponen las leyes propias de un estado de derecho, sino por consideraciones políticas y contrariando la legislación.
Ése es el caso de Chile, atendiendo a esa definición. Actualmente hay más de 200 presos políticos en diferentes recintos penales, el doble que en el Perú, condenados contraviniendo normas expresas de la Constitución y las leyes chilenas. Esas personas han sido perseguidas por haber combatido, entre 1973 y 1990, a terroristas que pretendían hacerse del poder y cometían graves atentados contra militares y la población civil, con el respaldo de Cuba, la Unión Soviética y Alemania Oriental, en este último caso todo ello documentado por el autor norteamericano John O. Koehler en su libro "Stasi".
Corresponde que su gobierno conmine al chileno actual, tal como lo ha hecho con el del Perú, porque el régimen del Presidente Piñera, en su actual mandato y en el anterior de 2010-2014, no sólo fue cómplice activo sino coautor de la mayor parte de las querellas ilegales que condujeron a privar de libertad a esos 200 presos políticos. Lamentablemente en Chile el Poder Judicial se halla, desde hace diez años, en manos de una mayoría de jueces rojos que ejercen una verdadera razzia contra quienes derrotaron por las armas al terrorismo de extrema izquierda.
En estos mismos días el régimen ha suspendido de su cargo al alcaide del presidio de Punta Peuco por limitarse a aplicar la ley sobre libertad condicional a 15 presos políticos militares. El gobierno así contraviene no sólo la ley, sino la Constitución chilena, al negar la libertad condicional a esos presos políticos, pues la Carta veda aplicar las leyes penales con efecto retroactivo y establece el principio de que debe regir la norma más favorable al reo.
Como en Chile no existen instancias políticas capaces de oponerse al control que la extrema izquierda, con la coautoría del gobierno y la indiferencia de la mayoría parlamentaria, ejerce sobre el Poder Judicial y que ha originado los más de 200 presos políticos existentes, sólo un estadista de categoría mundial y dotado de suficiente coraje político, como lo es usted, puede ejercer verdadera influencia diplomática y hacer respetar los derechos humanos de estas personas. Nadie más es capaz de elevarse por sobre las consignas izquierdistas reinantes y que repiten las "élites habladoras" (Paul Johnson); nadie puede denunciar mejor que usted este atropello chileno a los derechos humanos, la Constitución y las leyes que se está perpetrando contra los militares que derrotaron a la guerrilla marxista.
Un reciente video norteamericano advierte a los propios Estados Unidos sobre el riesgo de que los combatientes contra el terrorismo de Al Qaeda caigan en el futuro en manos de jueces politizados de izquierda, como lo dice textualmente, y muchos uniformados pierdan su libertad en venganza por haber triunfado contra los terroristas.
Es la oportunidad, señor Presidente, de que usted intervenga, una vez más, en defensa de la libertad, los derechos humanos y el estado de derecho en el mundo y, en particular, en un país amigo que comparte los mismos ideales de los Estados Unidos pero está en este momento siendo sede de un múltiple atentado contra los derechos fundamentales de quienes combatieron para permitirle preservar su democracia y su libertad.
Confío en que los representantes de su gobierno en Chile o personas que compartan sus ideales de libertad y fidelidad a la verdad histórica le hagan llegar esta petición y que ella promueva la misma acción en Chile que su gobierno ha desplegado en el Perú, en defensa de la legalidad, la justicia y la verdad que han sido atropelladas para privar de su libertad a 200 presos políticos militares en mi país.
Fuente: http://blogdehermogenes.blogspot.com/
.