Osvaldo Rivera Riffo
Presidente
Fundación Voz Nacional


El presidente sin pudor alguno se permitió hablar de la vida de los Santos y para ello nada mejor que referirse a San Lorenzo. Lo hizo con tal desparpajo intelectual que temblaron las escrituras y se inscribe dentro de aquellos apóstatas que incumpliendo las escrituras y tergiversando  de manera vergonzosa la historia y la obra del santo Diácono para así sacar un provecho electoral ante un grupo de personas, pescadores todos, a quienes seguramente fuera de la devoción les falta instrucción y formación histórica.

Entonces yo, que tengo un poco más de conocimiento intelectivo que el presidente y que puedo hacer una correlación crítica de las ideas voy a dar mi opinión sobre el proceso a Cristo y su homologación con los hechos que ocurren en nuestra patria.

Dicen las escrituras que en medio del proceso se producen diversas torturas ejemplo el azote en la columna y las burlas, llamadas, “improperios “por parte de los soldados romanos o de los esbirros del Sanedrín, llamados “sayones”. El sentido de las burlas está relacionado con la realeza y sus símbolos de un modo paródico: coronación de espinas, manto de Herodes, o el manto púrpura de Pilatos.

Jesús es exhibido en un estado lastimoso ante la multitud, a la que se ofrece la posibilidad de perdonarlo, según la costumbre de la Pascua Judía, dando a elegir entre Jesucristo y Barrabas. El que prefieran liberar a Barrabas es presentado como la exención de responsabilidad de Pilatos y los romanos “lavo mis manos de sangre inocente “y la consiguiente responsabilidad colectiva del pueblo judío. Todo el pueblo dijo: su sangre sea sobre nosotros y sobre nuestros hijos, pasaje de las escrituras, que se ha usado como justificación del antisemitismo y del cual el comunismo y sus secuaces tiránicos han dado muestras de horror y muerte donde han controlado el poder. De la misma forma como otra doctrina totalitaria el nacional socialismo en su holocaustica idea de la raza pura, cometió las feroces atrocidades contra miles de personas y como perdedores de la guerra sus crímenes sirvieron de manto para los crímenes de uno de los vencedores que hoy se erigen como uno de los principales adalides de los derechos humanos: cinismo puro y duro y una de las mentirá políticas mejor estructuradas. Pero así funciona el comunismo, la mentira por delante y el hoy llamado cancelamiento del disidente, que fue origen de los Gulag de la época Soviética o a simplemente los psiquiátricos o cárceles en Cuba o Venezuela.

Sin duda que la escuela de Derecho de la U. de Chile al ponerle el nombre de una comunista redomada a su biblioteca, ahí donde se enseña el valor de la justicia, le hace homenaje a los Gulag que hoy nos quieren imponer.

Pero sigamos con el juicio de Cristo, como todos sabemos Jesucristo fue condenado a muerte por el Sanedrín que era el tribunal supremo judío en aquella época y que estaba formado por 71 miembros ancianos del pueblo de Israel.

Haciendo con toda intención un paralelo histórico, Jesús proclama la verdad y es condenado a la crucifixión y salvado el peor de los delincuentes: Barrabás.

Pues bien aquí el 15 de noviembre un grupo de políticos encabezados por el presidente de la época y con el apoyo del diputado Boric, actual mandatario, se giró la verdad y de una gran mentira crearon un contubernio que determinó, en medio de las llamas que ardían en Santiago, para apagar el fuego, tirar la constitución de la República, cuando nadie pedía cosa semejante y las encuestas de la época daban a ese interés menos del 6% de importancia.

Se miente y se busca un ardid histórico para desacreditar todo lo construido en los últimos 40 años y se da lugar a la materialización en los hechos “no son 30 pesos son 30 años”. El mismo emblemático número con el cual Judas traicionó a Jesús.

Con el tiempo se da lugar a un proyecto por encargo del pueblo y terminado el infundio una sacerdotisa de calle Suecia, Anasa Cubillos, sentenció y dio por muerta la constitución que nos rige y en el mercado de Valparaíso los sayones se arrebolan para proclamar el indulto y amnistía para los presos por delitos graves que provocaron en lo que la izquierda ha sindicado como “estallido social”, eufemismo para cubrir el terrorismo urbano y que fue la causa central de lo que hoy políticamente vivimos.

La verdad proclamada contra la infamia, la mentira y la injusticia.

En el Sanedrín de Suecia se sentencia la actual constitución. Caifás Macaya lleva la palabra conversando con Pilatos y los Sayones de todos lados proclaman la buena nueva de un estado plurinacional y la muerte de la República.

Han pasado 2022 años y nada ha cambiado de ese barro sagrado con el cual Dios hizo al hombre y le dio vida con el soplo divino. Hoy hay quienes se revuelcan en su propio barro putrefacto porque renegaron del valor divino del hombre y usan la mentira para controlar el poder.

De tal forma señor presidente, que San Lorenzo le presentó al prefecto Romano la única riqueza que tenía la iglesia, los pobres, no solo materialmente sino que ricos espiritualmente. Riqueza que Ud. no tiene ni mucho menos su conglomerado, de tal manera que no se atreva nunca más a tergiversar la historia en beneficio político. San Lorenzo murió en la parrilla ordenado por el tirano gobernante, el emperador Valeriano. Y el papa Sixto II, a quien usted le achacó el crimen, había sido degollado cuatro días antes por orden del mismo emperador. La audacia de mentir tergiversando la historia y haciéndola útil a sus intereses políticos se paga cara:

Recuerde a los Ceausescu, al Che Guevara, al mismo Allende, su mentor ideológico, a la mujer de Mao entre muchos otros, todos pagaron sus culpas y el desprecio de la historia.

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