Osvaldo Rivera Riffo
Director Fundación Voz Nacional

"La soberbia es una capacidad que suele afectar a pobres infelices mortales que se encuentran de golpe con una miserable cuota de poder"
José de San Martín 

La plaza Baquedano:

Que lejos están los tiempos en que el conjunto de espacios públicos conocidos como plaza Baquedano o Plaza Italia, fueron diseñados como homenaje a nuestro centenario como república independiente.

Sin embargo ambos nombres corresponden a consideraciones distintas. Plaza Baquedano es el homenaje del pueblo de Chile al general victorioso de la Guerra del Pacifico y donde está la urna funeraria del Soldado Desconocido. Es el espacio central de esta gran explanada. A un costado y posición sur-oriente se instaló el Hombre Alado y el León, regalo de la Colonia Italiana en 1910 para el centenario de nuestra independencia. Se emplazó en la plazoleta frente a la famosa Estación Pirque, de estructura y características similares a la Estación Mapocho construida por Emile Jequier, también como homenaje a nuestro centenario nacional. Por disposición de la autoridad fue demolida en 1943 permitiendo que llegara a esta zona un tranvía cuya vida útil llegó hasta 1964, fecha en que dejó de circular.

Como suele ocurrir en Chile, las consideraciones de los urbanistas aconsejaron demoler esta magnífica construcción como también la estación Ñuble y se construyó el parque Bustamante

Que diferencia con los países desarrollados como Francia, en que la estación de Orsay -antigua vía ferroviaria- la transformó en uno de los museos más relevantes de Paris, que alberga la pinacoteca impresionista más importante del mundo. Si hubiese habido visión de país, la Estación Pirque podría haber albergado toda la colección de pintura nacional de fines del siglo XIX y comienzo del XX que se mantiene oculta en su mayoría en los subterráneos del Bellas Artes. Pero que nos extrañamos si el único homenaje escultórico a los grandes músicos clásicos, emplazado en la terraza del palacio Schatz fue destruido por orden de la actual alcaldesa en Providencia.

Luego en nuevas remodelaciones producto de la construcción del metro, la escultura italiana que representa el genio de la libertad simbolizada en un hombre alado con una antorcha en la mano derecha y la otra colocada sobre el lomo del León, que representa la majestad de la República, fue trasladada a su ubicación actual en posición nororiente.

Toda esta historia de nuestro patrimonio histórico la he traído a colación no sólo por ser el foco del mayor agravio a la inteligencia, sino porque se ha transformado en el símbolo de la peor barbarie con la que descerebrados de todas las edades han asolado a Chile.

Hoy, cuando producto del estado de excepción que vivimos tenemos oportunidad de observar el daño causado al espacio público y a los sectores aledaños, podemos llegar a comprender en plenitud lo que significa la carencia de autoridad y la complicidad de las autoridades políticas con el daño material, moral y espiritual de los vecinos de la mal llamada zona 0. Una imagen perversa y diabólica que sale al mundo y que será muy difícil de borrar en el consciente internacional. Es lo que somos ¡una población dominada por la barbarie! mucho peor que la que azotó al imperio Romano y que dominó el norte de Europa hace ya más de 1000 años. Esas peleaban e invadían por conquistar nuevos territorios, subsistir y obtener como botín los adelantos del Imperio. Aquí es todo lo contrario: destrucción material, freno al progreso y siembra de odio y resentimiento.

La Plaza Baquedano, símbolo de nuestro patriotismo, símbolo de los más preciados valores de nuestra chilenidad, símbolo y portada de un país pujante y señero en el camino al desarrollo, convertida en campo de guerra donde prima la venganza y el odio.

El Presidente Piñera detuvo espontáneamente su regreso a casa y bajó a fotografiarse en las ruinas del famoso monumento.

¿Tiene algún sentido lo que hizo? ¿O simplemente un capricho o humorada?

Cualquiera que fuese la razón, una vez más debiera controlar sus ímpetus. Es el Presidente de la República y está llamado a la prudencia de sus actos.

No quisiera pensar que algún iluminado del segundo piso le sugiriera semejante ocurrencia. Si fuese así, la falta de criterio político daría muestras aterradoras de para adónde vamos.

Si fue una acción planificada yo habría esperado un desagravio del Presidente a la historia. Me habría hecho acompañar por una delegación de jóvenes soldados de todas las ramas de la defensa nacional y habría colocado una ofrenda floral de tal forma de borrar definitivamente el mito de territorio conquistado por la izquierda y habría callado para siempre la voz pegajosa y trasnochada de cuanto comunista ha querido hablar para insultar.

Es mi modesta opinión, pero dudo mucho que lo haga. Parece que comparte el desprecio por la historia, al sacarse una foto como turista despistado.

"El mejor amigo es el que enmienda mis errores o reprueba mis desaciertos"
José de San Martín 

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