17 de Mayo de 2024
Hermógenes Pérez de Arce
¿Cómo se consigue tener a la población más atemorizada del mundo? Premiando delincuentes y apresando policías.
Una crónica de El Mercurio hoy lo ejemplifica: dice que B.M.H.E., de 27 años, que goza de una pensión de gracia otorgada por este gobierno, fue detenido ayer en Ovalle. Tenía órdenes de detención por conducir bajo influencia de estupefacientes, maltrato de obra a Carabineros, receptación de vehículo robado, hurto y consumo de drogas. Notable "hoja de servicios". Pero estaba libre. Porque tenemos la justicia que tenemos.
A su turno el capitán de Carabineros Hugo Navarro está condenado, por esa justicia, a seis años de presidio "en calidad de autor del delito frustrado de homicidio de B.M.H.E., detención ilegal y falsificación de instrumento público".
"Homicidio frustrado". Es decir, el ministerio público y los jueces nos aseveran que el capitán Navarro quería matar a B.M.H.E. y lo intentó, pero no lo logró. Pero eso no es verdad: en pleno estallido insurreccional, el 19 de octubre de 2019, el capitán había procurado detener la actuación destructiva y vandálica de B.M.H.E. en Ovalle, luchando y forcejeando con él. Para dominarlo debió herirlo en una pierna con su arma de servicio. Estaba cumpliendo su deber de proteger a la sociedad, autorizado por la ley, porque el art. 411 del Código de Justicia Militar dice: "Estará también exento de responsabilidad penal el Carabinero que haga uso de sus armas en contra del preso o detenido que huya y no obedezca a las intimaciones de detenerse".
Pero en Chile los jueces no respetan esas leyes. Al contrario, han condenado al carabinero, que quiso impedir desmanes, como si hubiera salido a la calle con el avieso propósito de matar a B.M.H.E y no obligado, como en verdad lo hacía, y en cumplimiento de un pesado y desagradable deber que no podía eludir: enfrentar a energúmenos violentos y pertrechados de elementos para destruir bienes, herir y hasta matar policías. Y recibió "el pago de Chile": lo condenaron a seis años de presidio. Y B.M.H.E. también recibió "el pago de Chile": una pensión de gracia vitalicia.
¿Por qué los chilenos eligieron mayoritariamente como gobernante a quien personifica ese sesgo moral favorable al delito y a la destrucción? Porque es un país donde se han trastocado por completo los valores fundamentales de una convivencia civilizada. Se castiga el ejercicio del bien y se premia y dignifica al mal.
Mientras Chile prosiga en su aberrante vocación de castigar la defensa de los valores fundamentales, mintiéndose a sí mismo sobre la realidad actual e histórica, condenando a sus agentes del orden y premiando con sus votos a los incitadores de los delincuentes y dándoles pensiones vitalicias a éstos y con una justicia que no respeta las leyes, su población va a seguir siendo la que experimente más miedo en el mundo. Será un top-one que no podremos perder.
Fuente: http://blogdehermogenes.blogspot.com/
.