2 marzo, 2025 

 

 

 

 

 

por José Carlos Meza


Lo ocurrido esta semana en la toma de San Antonio es inaudito. Deja sin palabras ver cómo este Gobierno, tan ineficiente a la hora de encontrar soluciones reales a los problemas habitacionales del país, es tan eficiente cuando se trata de perpetuar la irregularidad y la ilegalidad.


Para nadie es un misterio que la situación habitacional del país reviste un verdadero drama para millones de compatriotas. El hacinamiento, el allegamiento o la enorme dificultad para cumplir los requisitos que los bancos exigen para acceder a un crédito hipotecario y, con él, al sueño de la casa propia, son desafíos de los que hay que hacerse cargo cuanto antes, ya que cada día que pasa engrosa más y más el problema. 

Ante este panorama no muy alentador, es necesario que el Estado asuma las responsabilidades que le competen, siendo la primera de ellas el restablecimiento del orden y del estado del derecho. Por supuesto que debemos mejorar nuestra institucionalidad habitacional para que sea más ágil, desburocratizarla, destinar de mejor forma los recursos y evaluar métodos de colaboración público-privada, como diputado republicano estaré siempre disponible para este cometido.

Pero lo que no podemos tolerar, bajo ninguna circunstancia, es el retorno al estado de naturaleza descrito por Thomas Hobbes en El Leviatán, que es lo que hemos visto en cada una de las tomas que vienen proliferando en Chile desde el 2020. ¿Le vamos a decir acaso a las personas que ante la incapacidad del Estado para hacer su trabajo estarán facultadas a resolverlo por mano propia, tomando -muchas veces de manera violenta- la propiedad de otros?, ¿Qué le vamos a decir a los ciudadanos respetuosos de la ley que sí siguen los conductos regulares y que ven con impotencia cómo los años pasan sin soluciones habitacionales para ellos, pero sí para los violentos? 

Lo ocurrido esta semana en la toma de San Antonio es inaudito. Deja sin palabras ver cómo este Gobierno, tan ineficiente a la hora de encontrar soluciones reales a los problemas habitacionales del país, es tan eficiente cuando se trata de perpetuar la irregularidad y la ilegalidad, incluso negociando con los dueños del Cerro Centinela para que la Corte pudiese postergar el desalojo. Es decir, seis meses más de irregularidad.

El precedente queda.

Fuente: https://ellibero.cl/tribuna/irregular-e-ilegalmente-eficientes/

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