Cristián Labbé Galilea
Ver las noticias y los reportajes de televisión, así como los comentarios de los periodistas, producen a veces… risas, pero siempre… ira. Fue lo que a muchos les ocurrió al ver el especial de TV que recordaba el paso del Cometa Halley por nuestros cielos la noche del 10 de abril de 1986. Generó risa que, en ese programa, se sostuviera -poco menos- que Pinochet… había inventado el fenómeno Halley. A contrario sensu… la ira surgió al escuchar que, quien avalaba la “instrumentación” política de dicho evento astronómico, era nada más ni nada menos, que el propio Ministro de las Comunicaciones de la época… (F.J. Cuadra), quien se atribuía, con no poca arrogancia, la autoría de la iniciativa. ¡Inaceptable… por decir lo menos!
Hoy se suceden con frecuencia situaciones similares. Para la risa fue ver a la Jiles señalar que estaba dispuesta a inmolarse y “renunciar a ser Presidente de la Republica” (sic) si el gobierno aprobaba el tercer retiro del 10%, al tiempo que le declaraba su “ilimitado amor” a quien el fin de semana reconoció -con todo desparpajo- haber pertenecido a las milicias armadas del F.P.M.R. En este caso, la ira la generó ver a una “vieja de…” atribuyéndose el título de “abuela”, ofendiendo a tantas mujeres que nada tienen que ver con ella, y el ver a un terrorista confeso aspirar a ser Gobernador de la R.M.
También ha sido para la risa ver como muchos políticos de nuestro sector -dije muchos, no todos- terminan con “torticolis valórica” de tanto mirar para la izquierda, la centro izquierda, la social democracia mientras con la misma energía y sin ningún escrúpulo tuercen la mirada al sector que han traicionado reiteradamente. La ira surge al comprobar la inconsecuencia de estos “señores…” que han quebrantado el ordenamiento institucional asumiendo funciones privativas del Ejecutivo con “resquicios legales”, como lo hizo Allende en los 70, aunque ahora les sale gratis… ¡Nadie les dice nada!
Por lo mismo, da ira ver como en la Araucanía y en la Macrozona Sur -literalmente en llamas- campea la violencia, se mantienen cientos de Tomas, los Retenes de Carabineros son atacados con armas de grueso calibre… mientras las autoridades siguen pensando que la amenaza terrorista se puede contener con la visita de una autoridad nacional o con el cambio del Delegado Presidencial. Lo grave de este caso es que la risa corre por cuenta de los violentistas… quienes se “jajaguean” ante la debilidad del Estado para mantener la seguridad de sus habitantes y la integridad de su territorio.
Son muchas las situaciones que hoy causan hilaridad: el “baile de posiciones” frente a un nuevo retiro de las AFP, la ligereza con que se discute la Eutanasia y el “impuesto a los más ricos” … sin embargo, lo que no debiera causarnos ninguna gracia es ver nuestra realidad licuada, desbaratada, diluida, transformándonos en “un país patas pa´arriba” donde, quienes dicen hacerlo muy bien, paradojalmente…. ¡mientras más tratan… más lo desbaratan!
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