09 julio 2024 

 

 

 

 

 

por Tomas Bradanovic 


Hace un par de días, cuando se revisó la prisión preventiva del alcalde Daniel Jadue, este apareció en el tribunal con las manos engrilladas y la pechera amarilla de los presos, con un asa para sujetarlos del cuello. Al verlo pensaba en la humillación que esta puesta en escena significaba para los militantes del Partido Comunista.

Jadue no es un comunista cualquiera, había sido precandidato presidencial en la elección pasada y una de las figuras "jovenes" destacadas del partido. La forma en que fue presentado por Gendarmería fue inusual, al no tratarse de un tipo peligroso con riesgo de fuga. 

Creo que fue una señal potente para su Partido, cuyos dirigentes y militantes se la han jugado por "manifestarse" protestando en las puertas del tribunal y también en declaraciones de sus dirigentes.

Yo creo que se consultó. a nivel político como iba a ser llevado al tribunal: esposado o con las manos sueltas, vestido normal o con traje de preso, dudo que eso haya quedado al capricho de un funcionario menor de Gendarmería.

Jadue hasta hace muy poco tenía poder, era temido porque el Partido Comunista le guardaba las espaldas, tanto así que se dio el lujo de "hacer desaparecer" unas grabaciones que lo incriminaban en otro delito, desde el propio cuartel de la Policía de Investigaciones. Esa jugarreta no la hace cualquiera, y hacía pensar a muchos que de alguna manera los jueces le iban a dar la pasada.

Pero igual cayó en desgracia, más bien el gobierno lo dejó caer, a diferencia de Giorgio Jackson, otro delincuente al que movieron todos los hilos para que saliera a capear el temporal lejos de Chile. La Fiscalía trató con infinito cariño a Jackson pero no tuvo contemplaciones con Jadue.

¿Por qué esta caída en desgracia? Porque Jadue es solo una muestra de la pérdida de poder de los comunistas dentro del gobierno. 

No mucho tiempo atrás hubo otro terremoto cuando el gobierno le "pidió la renuncia" a Juan Andrés Lagos, un muy notorio comunista.

Lagos fue secretario general del PC, presidente de directorio de la disuelta Universidad Arcis, defensor del chavismo, del alcalde Jadue y ex colaborador cercano de la propia Gladys Marin. 

Afirmado en esos pergaminos Lagos se sintió lo suficientemente seguro para afirmar que el gobierno de Venezuela no tuvo nada que ver con el crimen en Chle del teniente Ronald Ojeda y fue a protestar a favor de Jadue el día que le decretaron la prisión preventiva.

Todo esto siendo asesor del Ministerio del Interior. Entonces Boric lo mandó a pasar por la guillotina, sin darle siquiera la oportunidad de salir con algún pretexto decoroso: lo purgó públicamente.

Pero esto no fue todo, hace solo un par de días se hizo una gran redada policial contra la Radio Villa Francia, un bastión del terrorismo urbano de los comunistas en Santiago. que durante décadas nadie se atrevió a tocar. 

Esa fue una verdadera noche de los cuchillos largos donde cayeron detenidos, incautaron armas, materiales para hacer bombas molotov y cosas por el estilo. El asunto es que desde hace más de 20 años todo el mundo sabe que la Radio Villa Francia es un escondite de los terroristas más radicalizados.

No era un secreto para nadie que desde allí todos los años se organiza el "día del joven combatiente" donde salían a hacer barricadas y destrozos años tras año.

Pero nadie se atrevió nunca a tocarlos ni con el pétalo de una rosa, es más, desde la Fiscalía los protegían por ordenes de los políticos y nunca se movió un dedo contra ellos. 

Pero todo eso cambió ahora y se le vino encima la noche a la Radio Villa Francia.

¿Por qué están pasando estas cosas? ¿Por qué este cambio radical de actitud? Hasta no hace mucho tiempo los comunistas eran prácticamente intocables. Jadue había robado a manos llenas y tenía a su comuna sumida en la basura y violencia, impunemente, sin que le pasara absolutamente nada.

Mi teoría es que la desintegración del Partido Comunista empezó cuando Michele Bachellet asumió su segundo gobierno de la mano con los comunistas. Recuerdo que la mayoría de la gente se admiraba, y no pocos veían con miedo lo que veían como un enorme avance del partido.

Me da flojera buscarlo, pero yo escribí por esa época que eso iba a ser la ruina del Partido Comunista, que no había nada peor para ellos que llegar al gobierno, iban a perder sus bases populares, se corromperían y se empezarían a descomponer tal como antes le pasó a los radicales y a los demócrata cristianos.

Y eso es exactamente lo que está pasando, porque la fortaleza histórica del Partido Comunista -que nunca fueron muchos en Chile- era su condición de partido ideológico. Los comunistas tenían bases, masas, que no eran muchos pero eran machos. Eso ya se perdió para siempre.

En los setentas yo tuve cierto coqueteo con las ideas comunistas  y fui a algunas de las clases que hacían en la escuela de cuadros. Nos hacían leer mucho y la mayoría no entendía ni una palabra, pero todos sentían que sabían y que la basura resentida con que los adoctrinaban era una ideología justa y buena.

Eso dejó de existir hace rato. Los comunistas de hoy son todos empleados públicos, cafiches del Fondart o cosas por el estilo. Su única ideología es hacer el máximo de plata, por las buenas o por las malas y eso explica que ahora la mayoría sean ladrones o hipócritas.

Bachelet, que es una vieja mala y ambiciosa hasta los huesos, los llevó a su gobierno por interés, pero con eso les pudrió el alma. Hoy los viejos son burócratas desencantados y los comunistas jóvenes son poseros, más tontos que una puerta pero buenos para buscar el billete.

Los comunistas nunca debieron llegar al gobierno, esa fue su ruina porque los dejó sin mística, los únicos seguidores que les quedan son parte del lumpen, y ni siquiera todos porque también hay lumpen que son fachos pobres como yo. No todos pero hay.

No tienen diferenciación ni futuro y Boric con sus merluzos, que en el fondo son un refrito de los antiguos demócrata cristianos, ya se dieron cuenta que empiezan a ser una carga. 

El merluzismo -que es la nueva izquierda- es pragmático, como Camila Polizzi o Catalina Pérez, gente sucia y sin lealtades con nadie: cagadores finos. Y cuando empiezan a aparecer animales heridos en la manada les importa un pepino dejárselos a los buitres.

Yo creo que esa es la explicación de la pérdida de poder acelerada -que para mi es evidente- de los comunistas: perdieron su mojo. Y es también lo que les espera a los merluzos, tal vez no mañana ni pasado... o tal vez si, nunca se sabe.

Fuente: https://bradanovic.blogspot.com/

.