Por Raúl Pizarro Rivera
La gira de Gabriel Boric por Europa, a muchos les trajo el recuerdo de un libro titulado El Viaje de Juanito Pierdedías, de Gianni Rodari, toda una sátira sobre un viajero que fantasiosamente recorre latitudes imaginarias sin importarle el tiempo. Una gran delegación acompañó al Mandatario, entre ellos, el ministro de Economía, Nicolás Grau, quien se reunió ¡en un café berlinés! con empresarios alemanes en su objetivo de atraer inversionistas de ese país.
Otro, sin haber temática que lo incumbiese en el viaje, el ministro de Justicia, Luis Cordero, aprovechó el ticket aéreo para reunirse con su esposa, embajadora con sede en Berlín, y la rectora de la Universidad de Chile, Rosa Devés, se embarcó conociendo y sabiendo de los carteles insultantes en su contra en la Casa Central y de las tomas de campus y Facultades, como la de ‘Juan Gómez Millas’, humillante para sus docentes, marcados a la fuerza en sus manos, como si fuesen animales.
Con una pompa impropia del progresismo, La Moneda anunció que los motivos centrales del viaje presidencial fueron la promoción del litio chileno, que aún no explota el Estado, y el afianzamiento de los derechos humanos “en el mundo”. La pobre idea de “hacerse rico” gracias al mineral de los salares nortinos no corresponde a la realidad, dado el desplome de su precio en el mercado internacional y las supuestas utilidades de CODELCO en eventuales ventas con su socio, la privada SQM.
La sobre reacción gubernamental ante una millonaria ganancia a futuro, indujo a CODELCO a comprar en US$ 360 millones una empresa europea que jamás ha operado en nuestros salares, que no tiene un solo camión ni siquiera una carretilla de mano, y que, para peor, lleva largo tiempo en los tribunales locales.
El otro objetivo del viaje presidencial fueron los derechos humanos, pero Boric se encontró que en tres de los cuatro países por él visitados, realmente les preocupan, pero los de sus propios connacionales, ahogados por la inmigración ilegal y delictual, tan descontrolada como la de acá.
La nula importancia dada a su visita es que los europeos estaban concentrados en la Cumbre del G7, en Italia, resolviendo cómo y con cuánto hacer frente al avance del invasor ruso en Ucrania. Su secundaria presencia llegó a su máximo, cuando en Estocolmo se enteró -algo ofendido- de que parte de su programa oficial incluía una visita a una fábrica de camiones. Se excusó, argumentando que se quedaría en el hotel, “monitoreando la situación de Chile”, dañado por grandes inundaciones, las que motivaron que una diputada UDI que lo acompañaba se descolgara de la gira para volver a “ayudar en mi zona afectada”.
Lo inoportuno de la gira fue lo peor: abarcó Alemania, Suecia, Suiza y Francia, el primero y el último, dos de los Gobiernos más golpeados por el impactante avance de las derechas en las elecciones para el Parlamento Europeo. El desenlace anti-izquierdista fue advertido por todas las encuestas desde hace dos meses, en especial sobre lo ocurrido con Alemania y Francia, los dos países que aportan más diputados europeos.
27 países del Viejo Mundo participaron, mediante competencia interna de sus partidos, en la elección de diputados europeos con potestad de legislar para todo el continente. En Alemania, la primera parada de Boric, la gobernante socialdemocracia nunca había obtenido un resultado tan adverso desde la postguerra. Otro partido, Los Verdes, y base de la coalición de Gobierno, había conseguido un resultado histórico en 2019, pero ahora perdió ¡el 40% de sus votos! En cambio, la derecha pasó del 11% al 15%.
El interés del Presidente de Chile por visitar Alemania se redujo a un pedido de antecedentes originales sobre la ex Colonia Dignidad, en Parral, para poder proceder a su expropiación (¡¡!!) y, para variar, “a la reparación de las víctimas de los derechos humanos por las atrocidades cometidas al interior de Villa Baviera”, ocurridos hace medio siglo. Pudo evitarse el viaje y plantear tan “trascendental urgencia” a través de su embajada en Santiago.
Inoportunamente, Boric llegó a Francia en un momento de gran depresión para la (centro) izquierda y, en particular, para el Presidente Emmanuel Macron, ello tras la rotunda victoria de los conservadores históricos, que duplicaron en votos (32%) al partido del Mandatario.
Fue tan estrepitosa la derrota gubernamental, que Macron, de inmediato, disolvió la Asamblea Nacional y anunció elecciones parlamentarias anticipadas para este 30 de junio y el 7 de julio.
Menos mal que Boric no pasó a visitar a su gurú progresista Pedro Sánchez, en España, donde el opositor Partido Popular, de derecha, consiguió dos escaños europeos más que el gobernante PSOE. Para peor de sus males, el deslenguado embajador chileno en la península, Javier Hurtado, hizo público “el interés de Boric” por comprar material bélico a su amigo”, ya que dejó de hacerlo a Israel. Dos aviones CASA de esa procedencia han capotado, con innumerables muertos, uno en la Patagonia y otro en Juan Fernández.
Resignado a que los países visitados están abocados a sus propias vicisitudes y terremotos políticos, Boric se remitió a utilizar su gira en beneficio de sus intereses partidistas y, como siempre, sacando provecho electoralista. Dio disculpas “en nombre del Estado” a los exiliados que huyeron del régimen militar 50 años atrás…
A propósito, en su momento, y tras ser testigo del estilo de vida de los asilados en Italia, la suicidada hija mayor de Salvador Allende reflexionó, y escribió “¡pensar que por esta gente murió mi padre”!
Boric, hace poco, denunció que es “una traición” criticar al país en el exterior, y ahora se dio un festín, atacando a los empresarios (” deberían aprender de la visión que los de acá tienen sobre Chile”), calificó de ultraderechista a Republicanos -el partido más votado en la última elección obligatoria- y tendió un manto de suspicacias, al decir que “con la centroderecha sí tengo diálogos”, en su irrefrenable y desesperado afán de interferir y fracturar a la oposición.
Llegó a ser insultante, al afirmar que el avance de la ultraderecha -los marxistas no hablan de derecha, así sola- “constituye un peligro para la democracia” (¡¡!!), y ello luego de ser informado desde Santiago que, en las modestísimas primarias municipales, la derecha dobló en participación ciudadana a la izquierda. Omitió que no fueron precisamente las derechas las que sepultaron las democracias de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
Dejó por los suelos la intelectualidad de “su pueblo”, al decir que “erróneamente identificamos a Rusia con la izquierda”, como si constituyera una simple anécdota que su Presidente, Vladimir Putin, haya sido un oficial espía de la terrorífica y siniestra KGB de la (ex) Unión Soviética, su agencia de seguridad interior y de inteligencia exterior.
Por razones muy obvias, Boric eludió referirse a un desaguisado que le originó la primaria municipal con su nuevo aliado oficial, la DC. Dicho partidito alegó su mejor derecho a llevar candidatos para sus actuales 19 alcaldías, pero obtuvo, apenas, la opción de postular a ¡sólo 3 de ellas! Además, sus socios “socialistas democráticos”, el PS y el PPD, todavía no se explican las razones de su bajísima adhesión ciudadana.
Siete días antes de que el Presidente iniciase su paseo por Europa, todas las instancias de meteorología pronosticaron una devastadora ola de lluvias que hacía veinte años no castigaba a la zona centro/sur. Jef@s comunales de todos los colores, incluso la frenteamplista de Viña del Mar, protestaron por la carencia de prevención y la ausencia o muy tardía ayuda de entidades estatales para amortiguar los enormes daños materiales y humanos dejados por el agua y los vientos.
Desde Europa, el Presidente ordenó que los ministros se mostrasen en terreno, pero los afectados no querían la presencia de políticos auto propagandísticos, sino la de maquinarias y personal fiscal trabajando en la evacuación de aguas servidas y en la reparación de sus casas anegadas.
En rigor, a nadie le importó que este feroz cambio climático lo haya sorprendido en Europa, porque, a estas alturas, da lo mismo donde esté y lo que haga. Lo relevante será tenerlo acá para cuando se produzca el gran cambio político.
SI TE GUSTÓ, COMPÁRTELO
.
