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10 enero 2021 

 

 

 

 

 

Tomas Bradanovic


Y muy distintas. Con lo que está pasando por estos días en la Araucanía, en lo que han llamado "conflicto mapuche" mucha gente ha salido a opinar desde la ignorancia toda clase de tonteras, incluso algunos con formación militar, pero no muy conocedores del tema parece, confunden los términos, se quejan inútilmente y piden medidas absurdas como son el despliegue de fuerzas militares en la zona.

Antes de aclarar los conceptos -y no es que sea muy experto en el asunto, pero algo entiendo- quiero comentar por qué esa idea de ocupar militarmente la zona de la Araucanía es la estupidez más grande que se puede concebir. La gente común -e incluso muchos militares- ignoran la diferencia entre enfrentamiento armado de grupos regulares, acciones de guerrilla urbana y terrorismo, esto último es lo que ocurre actualmente en la Araucanía.

Imaginemos que se declara estado de sitio y se despliegan tropas de ocupación en toda la zona. La Araucanía solamente es un territorio de casi 32.000 km cuadrados así es que de cualquier modelo que lo hagan siempre quedarán áreas descubiertas, además existen probables focos de insurgencia en las regiones vecinas de Bio Bio y Los Lagos. Una ocupación militar con patrullajes permanentes requeriría de una logística enorme y el costo de mantener tropas allí al poco tiempo se haría insostenible.

Lo peor es que los focos de insurgencia están dentro de propiedades privadas, donde a veces solo se puede acceder también por caminos privados. Cualquier intervención, aún en estado de sitio, requerirá de ordenes judiciales, basadas en diligencias de Fiscalía. Sabemos perfectamente que muchos jueces y fiscales, así como gente que trabaja con ellos son cómplices o simpatizantes de los terroristas, así es que cualquier acción que se haga será conocida -sin ninguna duda- de antemano por ellos, sujeta a emboscadas y cualquier enfrentamiento con víctimas será abrumadoramente parcial en favor de los terroristas. 

Ese es un dato de la causa y mientras exista la Fiscalía y los jueces cómplices esto no tiene remedio. Mucha gente de manera muy superficial lo presenta como un problema de poder de fuego. Nada más equivocado, la verdadera fortaleza de los terroristas hoy son los fiscales y jueces que simpatizan o están atemorizados con ellos. Además es sabido que los terroristas en cada ocupación o allanamiento ponen a las mujeres y los niños al frente (como los terroristas palestinos, entre otros) así es que cualquier disparo militar tendrá pésimas consecuencias porque seguramente alcanzará a una mujer o un niño. En lugar de ayudar a solucionar el problema una ocupación militar solo lo puede empeorar.

En el terreno y condiciones de la Araucanía los fusiles de alto calibre y los blindajes militares no presentan gran ventaja. Para los terroristas el fusil de alto calibre es ventajoso por su uso con francotiradores. Las fuerzas militares de ocupación no podrían dar ese uso, la mayoría de los enfrentamientos se dan muy cerca. No olviden que a Catrillanca lo mató una bala loca de alto calibre, que bien pudo matar a un niño o cualquiera que anduviera casualmente por el lugar. Los vehículos blindados son pesados, poco aptos para el terreno agreste y un festín para las emboscadas durante los patrullajes.

Ahora vamos a lo que es importante. El asunto fundamental es que en la Araucanía no hay un problema de guerrillas sino de terrorismo, ambas cosas son muy distintas..

Qué son las guerrillas
Las guerrillas
 son cuerpos con organización militar, irregulares normalmente uniformados, con grados y todo eso, que se enfrentan a las fuerzas armadas de un estado con el objetivo de conquistar y mantener un territorio, que pasa a llamarse "liberado", disputar ese territorio al estado para, desde allí, intentar apoderarse del control de todo el país. Ejemplos de guerrilla son el sandinismo en Nicaragua, las FARC y ELP en Colombia. En Perú el PCP "Sendero Luminoso" y MRTA fueron intentos de pasar desde el terrorismo a la guerrilla, ambos abortados. En Chile nunca ha existido una guerrilla, aunque si algunos intentos como el abortado en Neltume.

Que es el terrorismo
El terrorismo
 en cambio no busca reemplazar al estado, hay varias definiciones pero casi todos coinciden en que se trata de acciones políticas para alcanzar ciertos objetivos acotados usando el terror indiscriminado a la población. Es fundamentalmente distinto de la guerrilla en el sentido que no busca aniquilar fuerzas enemigas sino causar el máximo terror con el mínimo de medios. En una entrada llamada Terrorismo: lecturas del mini.manual escribí sobre algunas de las principales diferencias entre estas dos forma de violencia política.

Se trata de dos animales muy distintos
Así 
como resulta ridículo tratar de matar a un ratón con un rifle para elefantes, o tratar de matar a un elefante con una trampa para ratones, es igualmente estúpido intentar las mismas tácticas para combatir dos formas tan distintas como son la guerrilla y el terrorismo.

Las guerrillas se combaten con fuerzas militares de la manera convencional disputando territorios, el terrorismo requiere una doctrina y tácticas completamente diferentes, de naturaleza político-policial,  que en todo el mundo desempeñan los servicios de inteligencia policiales que protegen la seguridad del estado. Éste párrafo de  Peter Walldman lo explica bastante bien:

Por muy espectacular que sea el efecto destructor proveniente de atentados terroristas, sea en bienes reales o en vidas humanas, nunca constituye su finalidad principal. Representa, más bien, sólo un eslabón en una cadena de reacciones provocada por los terroristas, cuyo extremo deberá estar constituido por el pánico y por formas de comportamiento dictadas por este sentimiento. Es en esta función intermedia que hemos caracterizado en el esquema a la violencia como "simbólica" y "comunicativa". Por decirlo así, el acto violento representa un mensaje amenazador dirigido al entorno social de la víctima, al que se le da a entender que le espera un destino semejante si no adopta a tiempo medidas en contra. Además, no hace diferencia, en principio, el que el mensaje esté dirigido por los que dominan a los dominados o, inversamente, por un grupo insurgente al gobierno -en la historia se conocen ejemplos de ambos tipos de proceder terrorista-, la lógica de la causalidad "indirecta" es en principio la misma. En el caso del terrorismo insurgente, los agentes violentos esperan que los representantes del poder estatal, sobreestimando el peligro de insurrección proveniente de los terroristas, reaccionen de manera exagerada y sometan a la sociedad a una campaña de represión. Se espera que esta represión provoque indignación y resistencia en la población, de manera que en el curso la escalada de la "violencia de abajo" y de la "violencia de arriba" se llegue finalmente a un levantamiento en masa y a la caída del gobierno atacado.

Cómo se combate el terrorismo
En todo el mundo
 y en todas las épocas el combate exitoso al terrorismo ha sido por medio de infiltración, desarticulación clandestina y muchas veces ilegal, efectuadas por los organismos de seguridad del estado. Como los objetivos del terrorismo son principalmente psicológicos, resulta imposible combatirlo dentro del mismo marco de los delitos comunes, las democracias más sólidas del mundo con fuerte tradición de estado de derecho, usan en estos casos la "razón de estado" que les permite actuar fuera de los frenos que impone la ley, esto ocurre en todos los gobiernos sólidos y pacíficos del mundo occidental. 

El terrorismo triunfa cuando se consolida en una guerrilla, proceso que puede tomar muchas décadas. Esto solo puede ocurrir en estados fallidos, cobardes y sin voluntad, como el de Anastasio Somoza en Nicaragua o Fulgencio Batista en Cuba por poner dos ejemplos emblemáticos donde la guerrilla llegó al poder. En otros países con gobiernos débiles ha estado cerca de establecerse, como en Perú de los noventas, pero finalmente ha sido aplastado dejando un reguero de muerte, destrozos y violencia inútil y sin sentido.

En Chile estamos muy, muy lejos de tener una guerrilla, pero tenemos un estado cobarde, y lo peor: políticos, jueces y fiscales que simpatizan y aún son cómplices de los terroristas. Ellos desarticularon años de trabajo de inteligencia policial, ellos envían fuerzas prácticamente desarmadas y amedrentadas de antemano por los propios jueces, al matadero, los mandan en formación como patos en una feria de tiro al blanco.

Esos políticos, fiscales y jueces son el verdadero enemigo que hay que exterminar de nuestro sistema. A ellos hay que enterrarlos con una retroexcavadora y pasarles encima una aplanadora para que no vuelvan a salir. Y eso es algo que solo se puede lograr desde la política, por eso yo estoy con J. A. Kast y el Partido Republicano, es la única instancia política con la decisión y posibilidad de pasarles la máquina.

Si queremos combatir el terrorismo hay que identificar y saber donde está el verdadero enemigo, que no son los traficas asquerosos de las comunidades, perkins aprovechando de forrarse con las drogas, robos, asaltos, extorsión y los fondos que reciben. El verdadero enemigo está hoy en La Moneda, Sebastían Piñera y su gente se han convertido en cómplices por su cobardía y oportunismo, los otros enemigos están en la mayoría de los actuales diputados y senadores, otros enemigos y cómplices muy peligrosos están en el Ministerio Público y finalmente unos cuantos -aunque no todos ni la mayoría- en los Tribunales. Si queremos combatir el terrorismo ese es el verdadero enemigo al que hay que apuntar antes que nada.  

Fuente: https://bradanovic.blogspot.com/

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