Por Arturo Frei

- Se acepta sin discusión y no se somete a debate, es un campo intocable, el cual la izquierda se atribuye como una conquista social, pero no solamente no es una conquista sino una injusticia y un desperdicio clave de capital humano para el desarrollo de la sociedad.

- La iniciativa del salario mínimo cuenta con un fuerte respaldo popular, por lo que los políticos no dudan en levantar estas banderas dado que su interés está en el atraer votos.

- Históricamente la Iglesia Católica ha estado a favor de las políticas de salario mínimo.

Decía Santo Tomás: “Así como la justicia exige que se pague por un objeto material un precio justo, así se reclama un justo salario para el trabajo humano”.

- El salario mínimo, a pesar de sus letales consecuencias para el empleo, se ha instalado y aceptado como un imperativo y cualquiera que se atreva a cuestionarlo, aunque sea técnicamente, es objeto de reproche moral y estigmatizado como inconsciente, sin embargo es todo lo contrario; es atreverse a contar las consecuencias reales aunque esto signifique una serie de prejuicios y descalificaciones. La economía se limita a explicar qué funciona y qué no lo hace.

- Es cierto que no es fácil cambiar esta mentalidad, pero para esto es necesario entender el origen del problema, las consecuencias (justamente para los que han tenido menos oportunidades) y cómo se determinan los salarios en una sociedad libre.

- Al empresario se le atribuye que tiene un poder de negociación mayor al del trabajador, y por ende es necesario que un estado poderoso defienda a la “parte débil” porque de lo contrario el malvado le pagaría mucho menos al empleado.

- Esto no deja de ser una falacia económica dado que en un mercado libre pueden suceder ambas cosas, tanto que se genere una escasez tanto en la oferta de trabajo, y aumenté el poder de negociación del empleador, como en la demanda por trabajo, aumentando el poder de negociación del trabajador.

- Todos queremos que los salarios suban, sin embargo esto no se puede hacer por decreto a través de una ley, como lo hacen en los países inflacionarios, sino que deben subir gracias a la productividad de los trabajadores, es ese el origen de la problemática, de lo contrario:

¿De dónde se obtiene la riqueza para pagar sueldos sobre su productividad? El resultado de esto es que las empresas ven mermadas sus utilidades y con esto sus expectativas de inversión, y por lógica simple, la inversión y la actividad empresarial es la que redunda en ofertas de trabajo y en ofertas de productos que son fundamentales para satisfacer múltiples necesidades, así como las mayores tasas de capitalización son el elemento clave para aumentar las productividades.

- ¿A quién realmente afecta el salario mínimo? Como sociedad nos termina por afectar a todos ya que deprime el crecimiento económico y la posibilidad de aportar de un segmento relevante de la sociedad, pero directamente en el corto plazo solamente afecta, y desde luego negativamente, a quienes tienen menor productividad, es decir solo a quienes ganan 288 mil pesos o menos, y sobre todo a quienes están desempleados, los que tienen menos posibilidades de encontrar trabajo porque las empresas por lógica económica solo contratarán a personas que produzcan más que el salario mínimo. Aunque a muchos les parezca increíble, en países como el nuestro, aún en vías de desarrollo y con escaso manejo de la tecnología e ingles, hay gente que produce menos del salario mínimo requerido por el estado, por lo que quedan fuera del mercado laboral, no por decisión de los empresarios sino por decisión de los políticos.

- Al imponer estas barreras a la contratación, los desempleados, principalmente los jóvenes que aún tienen que demostrar, por lo que están dispuestos a trabajar por menos, no pueden ser contratados si producen menos del salario mínimo. En simple, si el salario mínimo aumenta de 288.000 a 310.000 mil pesos, la consecuencia será el desempleo permanente de quienes han sido contratados entre estas dos cantidades.

- Los trabajadores que ganan más del salario mínimo no se ven afectados por esta ley

- El salario mínimo no proporciona nuevos empleos, solo los prohíbe. Todas las curvas de demanda son decrecientes, y la demanda por trabajo no es la excepción.

- Si no existiera dicha ley, todo el que quisiera trabajar, independientemente de su productividad, tendría empleo llegando a un acuerdo de salario con el empresario.

- Los precios libres, como decía el premio nobel Hayek, entre los cuales los salarios son pieza fundamental, dan información importantísima para los empresarios, reflejando donde existe escasez y donde existe crecimiento económico y necesidad de inversión. La alteración de los precios de mercado del salario solo genera desempleo, empleo informal y destrucción de capital.

DATOS

- En EEUU, donde existe salario mínimo, la renta familiar media es de 4.300 USD mensuales, mientras que en Suiza, donde no existe el salario mínimo, la media es de 6.800 USD mensuales, más de un 50% más mientras el PIB per cápita es solo un 30% mayor en Suiza.

- En Suiza el 18 de Mayo de 2016 hubo una votación para establecer un salario mínimo, que era un record a nivel mundial, sin embargo fue rechazado con un 76% porque las personas se declaran conscientes que su salario no depende de la voluntad de su empleador sino de su productividad, la cual es una mezcla de altas tasas de capitalización (ahorros) y otra dosis de educación.

- En países europeos donde no hay salario mínimo como Austria, Suecia, Dinamarca, Noruega, Finlandia, Islandia, Alemania, y varios cantones en Suiza, la economía funciona con muchísimo mayor dinamismo y calidad de vida para sus partícipes.

- El salario minimo impide que un empleador y un posible trabajador lleguen a un acuerdo si el salario ofrecido por el trabajador es menor al fijado por ley, y por ende el trabajador no es contratado y la empresa no puede contratar a ese trabajador. ¿Quién perdió?

Ambos. El trabajador no obtuvo el empleo y la empresa no pudo contratar el trabajador. A su vez perdieron otras empresas que no podrán venderle productos a esa persona que actualmente no tiene ingresos, y consumidores que no tendrán acceso al servicio que entregaría ese trabajador si tuviese empleo. Por último, también perdió el estado porque no recaudará los impuestos ligados a ese mayor crecimiento económico. En resumen, la actividad económica de creación de valor y la disponibilidad de satisfactores de necesidades en el mercado es menor cuando hay barreras artificiales, haciendo subir precios y limitando los accesos a bienes y servicios.

- ¿Es cierto que de no haber una ley de salario mínimo los empresarios pagarían salarios menores? No, dado que las empresas solo contratan en la medida que el trabajador sea útil para sus propósitos, independientemente del salario mínimo, solo haciendo el cálculo si le será rentable para su proyecto empresarial contratar al trabajador. El empresario busca maximiza su utilidad, intentando bajar siempre los costos, entre los que se encuentran los salarios, mientras que los trabajadores siempre esperarán ganar lo más posible. En algún lugar entre estas 2 expectativas se generará el acuerdo de sueldo, el cual solo se realizará si el estado permite el intercambio libre al salario que determinen de común acuerdo ambas partes.

- El contrato de trabajo al ser un intercambio libre, ambos tienen el derecho de aceptar o rechazar lo que propone la contraparte, y jamás puede tratarse de injusta la situación. Si el acuerdo se materializa ambas partes están mejor, ya que de lo contrario no hubiesen suscrito el acuerdo ya que lo hicieron libremente.

- ¿Cuál es el problema con el salario mínimo? Primero de principios, debido a que no permite el intercambio libre entre las partes, oferta y demanda por trabajo, usando la coacción, la fuerza si fuese necesario para limitar dicho intercambio libre.

- En una sociedad libre, los salarios se van determinando libremente a través de los precios (salarios), los cuales proveen información clave para que los empresarios entiendan donde están las mayores valoraciones en la sociedad y las necesidades de los potenciales consumidores, y los recursos, por definición siempre escasos, sean asignados en lugares donde son necesarios y no se dejen llevar por falsas señales que llevan a la destrucción de valor.

- Esto lo grafíca muy bien la “destrucción creadora” que hablaba Joseph Schumpeter, donde las empresas quebraban en la medida que dejaban de ser competitivas en el mercado y se detenía el gasto innecesario de recursos y naturalmente se reasignaban donde había mayor escasez, la que a su vez solo se puede detectar mediante el sistema de precios libres.

Fuente: https://www.fnm.cl/blog/2018/11/12/salario-mmimo-por-ley-en-defensa-de-los-ms-desprotegidos-por-arturo-frei

 

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